miércoles, 29 de octubre de 2008

Vueltecita

Ayer vi a Hiro. Comimos "Italiano" en Mykal. En realidad, la comida en Japón me sabe igual aunque sea italiana. Platicamos de mi impresión de Japón y de la suya sobre los extranjeros que quieren vivir y trabajar aquí. Nos tomamos fotos Japo para enviarle a la China y a Héctor por su cumple y después me trajo en su moto de regreso a casa. La placa: 1974, ¡ja!

Le regalé el Principito y él me leyó "Sokusu no yakusoku", o "La Promesa de Sokusu", sobre un perrito. 


lunes, 27 de octubre de 2008

Tomodachi

El domingo por fin conocí las famosas puertas de Kyoto. Me encanta el naranja contrastado con negro y la repetición, repetición, repetición...

En la noche, cena en Osaka con Kitagawa, Fukagawa, Anna, Tada, Beto, Shina y Aow. Takusan nihongo o hanashimashita. ¡Me sorprendieron con regalitos de Doraemon!


lunes, 20 de octubre de 2008

Getsu


Este día Doraemon me acompañó a la escuela. La gente me saluda en el tren y me sonríe al verlo, sobre todo los niños, que gritan "¡Dora chan!". 

Al Sensei le gustaron las propuestas de joyería. Ahora voy a hacer los prototipos en papel. También fui a la tienda donde compré mis super lentes de sol. Como se les lastimó una pata, me dieron unos nuevos, subarashii!


domingo, 19 de octubre de 2008

La moto es la neta



Domingo, dimanche, nichiyoubi... día de motocicleta. Salimos Elena y yo con los amigos motociclistas en un grupo de 17 motocicletas: una Vespa, varias Yamaha, Kawazaki, Honda CBR y ¡una Hayabuza! Paseamos por el campo y las montañas, hasta un lugar que se llama "Nose". Sí, así se llama.

Lo primero que haré en México es abrazar a mi familia. Lo segundo, comer unos tacos. Lo tercero, treparme a una moto!!!!!!

Hikone


El sábado fue día de recorrer el Biwa. Llegué hasta Nagahama, que es una ciudad donde hay muchas artesanías de todos tipos, sobre todo vidrio. Me tocó de suerte que había un festival de Kimonos, así que tomé muchísimas fotos.

Después fui  a Hikone, que tiene un castillo que no me impresionó como el de Himeji. En fin. El atardecer estuvo chido desde las alturas, sobre el lago Biwa. De regreso conocí a unas niñas que se enamoraron de Doraemon.

Kobe encore


El viernes fue otra vez día de Kobe, aprovechando que tengo un pase de JR que Beto me regaló. Domo! Ésta es una ciudad que no me aburre y me doy cuenta de que me gustan las grandes ciudades. Quizá es mi favorita después de Tokyo. Caminé por la bahía, por la zona de compras y después me quedé horas haciendo un estudio de campo en Daimaru, las famosas tiendas departamentales. Me probé varias juegos de joyería con el fin de observar cómo se sienten al contacto con la piel, cómo combinan con otras piezas y demás cualidades. Es impresionante que un objeto pueda hacer sentir algo. Con varias cosas me sucedió que ya no me las quería quitar de encima. Los japoneses tienen diseños maravillosos en todo lo que sea moda: zapatos, ropa, joyería, bolsas.

El atardecer fue desde el puente más largo de Japón, con un pastelito. 

En la noche, volví a ver Amélie y me sentí completamente aludida.

jueves, 16 de octubre de 2008

Kobe

Kobe es un puerto muy importante de Japón. Hoy fui por segunda ocasión, acompañada de Doraemon. Pasé todo el día en la biblioteca del Fashion Museum, revisando libros y revistas sobre moda, joyería y Klimt. También vi un DVD de Marc Jacobs que me inspiró mucho porque refleja la pasión que este diseñador siente por su trabajo.

La cena fue en el barrio chino, con Beto San. Él es serpiente y yo tigre. Doraemon es rata.

miércoles, 15 de octubre de 2008

Tsuki


Hoy brilla la luna llena en Osaka. Fui a verla desde el lago con Beto, mientras hablábamos de la maravillosa experiencia que ha sido vivir en Japón.

De regreso, alcancé el final de "American Beauty", donde él habla de lo que ha sido su vida y los momentos importantes.

Hoy tuve un afortunado reencuentro. Por andar corriendo, abrí mi cangurera sin cuidado y después de mucho tiempo me di cuenta de que ya no traía mi pluma de colores, que es mi favorita. Me regresé a buscarla y a preguntar en la estación. Volví al punto de partida y cuando pensé que ya la había perdido, lo cual no dejaba de sorprenderme porque en Japón no se pierde nada- me asomé a las vías del tren y allí estaba, escondida. El señor de la estación muy amable la sacó para mí.

Me voy a dormir con Doraemon y Subarashii. Oyasuminasai!

martes, 14 de octubre de 2008

Gala Valeria


Ayer fue día de diseño. Me levanté temprano y salí temprano. El día rindió bastante. Al Sensei le gustaron mis propuestas y luego recibí la noticia de que ¡nació Gala Valeria! Se me llenaron los ojos de lágrimas cuando vi sus primeras fotos, pero las contuve porque estaba en medio de varios japoneses.

En la noche fui al super y estrené mi campanita de bici, que venía junto con Doraemon.

La noche en Osaka tenía luna llena y estrellas.

lunes, 13 de octubre de 2008

Largo fin de semana



Este sábado fui por fin al Fuji. Me imaginaba que estaría bonito, pero no formidable. Verlo no es algo que pueda explicar con palabras, apenas alguien como Hokusai pudo representar lo maravilloso de esta montaña de 3,776 metros. Es muuuuuy bonita y tuvimos la fortuna de un excelente clima que nos permitió admirarlo con las hojas de otoño. También estaba el Gran Premio de Fórmula Uno y nos enteramos que ganó Alonso ??? Lo único que yo sé de autos es que una vez confundieron a Henri con Adrián Fernández. Pero mi amigo Heriberto me contó otras cosas como que en el Autódromo Hermanos Rodríguez había una peligrosa curva conocida como "la peraltada".

En fin, subimos el Fuji hasta la mitad, en medio de la niebla. Qué bonito.

Regresando a casa, me reciben con una caja de Nagoya.... ¡Tengo un Doraemon!, el famoso gato azul que los japoneses tanto quieren y que me encantaba desde los 6 años. Domoarigatougozaimasu!!!! 

viernes, 10 de octubre de 2008

Viernes de deseos


Un día dedicado a bocetar y bocetar joyería. De pronto, me encontré a Carlos en Skype que me contó todo lo que ha logrado con Azure, qué bien.

Estuve pensando mucho en andar en moto y de pronto, mi amigo Kitagawa se apareció justo a la hora de comer, así que lo invité al Shokudo y después me dio una vueltecita en su Vespa. Yeah!

En la noche, Valdemar me enseñó que se compró un baobab. Por favor, lean el Principito.

jueves, 9 de octubre de 2008

De la Gran Ola al mall


Hoy fui a la estación Seta, patrocinada por Valdemar, jejeje. Fui al Museo de Arte Moderno de Shiga a ver una exposición de Hokusai, el famoso artista japonés de la Era Edo. Su más reconocido trabajo es sin duda la Gran Ola, que es un emblema de Japón donde se muestra el Fuji chiquito, pero imponente, detrás de un Tsunami. Me llamó la atención que mida tan sólo 36 cm. La exposición es muy interesante porque hay grabados de diferentes épocas. 

Por la tarde hice market research en las tiendas de la estación de Kyoto. ¡Cuántas cosas! Me probé durante horas joyería para entender sobre dimensiones y sensaciones. Me gustó especialmente la de Liz Claiborne y la marca japonesa Misty. Me gustaron los diseños muy sencillos y también los muy recargados. Es curioso que muchos de los diseños que vi, los traía en bocetos en mi mochila. ¡Ja! nada nuevo bajo el sol.

miércoles, 8 de octubre de 2008

8 de Octubre


Hoy falta un mes para que esté de regreso en México. Cuenta regresiva. El tiempo vuela. Estoy tomando fotos de todo e intento observar con más cuidado. Regreso al blogg.

Tres cosas avanzaron:
Por fin quedó la reservación para el aniversario de Mó y Harvey en Kananaskis. Fue una sorpresa medio trochona, pero quedó.
Terminé las tarjetas de Elena San, que es un cliente muuuy especial y le gustaron.
Y terminé un anillo en Rhino, que estoy aprendiendo en forma autodidacta. Los bocetos de mi joyería van bien.

Caminé en la Universidad observando las caras de tanta gente, las playeras con mensajes, la comida. tomé muchas fotos. Comí uno de mis platillos favoritos: hamburguesa con jitomate y lechuga. Sin pan. 

La clase de japo estuvo divertida. Vimos una forma nueva: shi y mo. Repasamos suguimasu. 

Hoy fui a un taller a pegarle la canasta a mi bici, que se desarmó. Los muchachos fueron muy amables y hasta me regalaron un té embotellado. me llamó la atención que había de todo como cualquier taller, pero, a diferencia de los de México, no había pósters de chicas semi o encueradas. En la noche desarmé por primera vez mi bicicleta porque aun pienso darle la vuelta al lago Biwa -el más grande de Japón-con ella. León san me ayudó. Descubrimos que la bici pesa 14 kilos. Aun no tiene nombre, pero voy a bautizarla. 

Hoy fue el fin de cursos de japonés en Nagoya. Diez mexicanos regresan el sábado. Los voy a extrañar mucho, pero espero volverlos a ver. Aburamu y China, híjole, qué chido haberlos conocido. Los llevo en el corazón.

martes, 22 de julio de 2008

La luna de cobija

Este fin de semana fui a Tokyo con varios amigos. Como siempre, fue muy interesante, pero ahora sólo voy a contar mi parte favorita. En la última noche queríamos dormir en un hotel cápsula, que según sé, es una especie de sarcófago donde te guardan, tipo Alien el 8vo pasajero. Por la novedad y para quitarme otro miedo: la claustrofobia.

Llegamos con el último tren a la estación de Ueno. Jamás había visto un lugar así: lleno de hombres durmiendo en el piso con sus cartones y periódicos. De plano le llamamos "Homelesslandia". Estuvimos por un buen rato buscando cápsulas, pero todas eran exclusivas para hombres. Así que a las dos de la mañana decidimos dormir tal cual en Homelesslandia, con la cara sobre el suelo y la luna de cobija.

Recordé a mi querida Doña Pili, que tantas noches pasó durmiendo sobre cartones junto al General Anaya, esperando a tomar el primer metro, después de trabajar en los banquetes. Hoy hablé con ella y le conté.

Cuando llegué a dormir en mi cama, me di cuenta -nuevamente- de lo afortunada que soy en tantos sentidos. La experiencia fue de lo mejor.

martes, 15 de julio de 2008

El tiempo


Como diría Dalí, el tiempo es relativo. Esa frase tiene muchísimo sentido en Japón, donde cada segundo es absolutamente precioso. Cada día que pasa es una experiencia completamente nueva. Es curioso que en México muchas veces decimos: "nos vemos luego", y ese luego nunca llega. A veces es más fácil que la gente se organice para ir a un funeral que a una fiesta.

Ayer salimos a despedir a Horacio, que regresa a México porque su pequeña de ocho años va a ser operada por segunda ocasión y quiere estar con ella, ¡que le cae de sorpresa, pues! Ya lo nombramos "el papá de año". El otro día platicábamos en las escaleras del edificio -nuestro pequeño Tlatelolco- y me decía que quería fotografiar varias  cosas antes de irse, como el amanecer y el atardecer. Entonces me di cuenta de todo lo que pasamos inadvertido cuando nos acostumbramos a verlo diario: los paisajes, la gente, los olores. Me di cuenta de nuevo de lo maravilloso que estar aquí, escuchando japonés en el metro, viendo a tanta gente pasar.

Hace rato regresé del cuarto de Fatima, que también regresa a su país -África- esta semana. Y hablamos de lo importante que ha sido la experiencia de vivir con tanta gente de tantos países, con tantas ideas. Me dijo algo que me gustó mucho: que la experiencia profesional que se lleva es del 30% y la personal del 70%. Pero -dijo- el 70% de la experiencia personal seguramente hará que sea mejor en lo profesional. Totalmente de acuerdo. 

Después visité a Elena-san que me ayudó a entender y responder un mensaje en japonés. Elena es un ángel, de verdad que sí. Por cierto, me enteré de que las dos tenemos el mismo asunto de pies diferentes: nuestro izquierdo calza del 25 y el derecho del 24. Me dijo que extraña al Guille... yo también, pero me alegró mucho recibir una postal suya de Madrid, donde nunca he estado.

La moraleja de hoy: carpe diem.

domingo, 13 de julio de 2008

Gracias por venir

Hoy se fueron Mó y Harvey... me pasé de los mejores días con ellos en Japón.  Fue un día triste-alegre porque me acompañó Aburamu. Como diría Cerati: ¡gracias por venir!

http://jp.youtube.com/watch?v=-kiHH3-2RNQ





miércoles, 9 de julio de 2008

Viva la vida


Hoy empezó triste con la despedida de Guille-san en el shokudo. Al mismo tiempo, me siento afortunada de haber coincidido en el mismo momento y espacio para conocer a un tío tan especial. Junto con la tristeza, la alegría compartida de todos los que gozamos de su amistad. ¡Que te vaya muy bien en Sevilla y hasta la próxima, chachi!

También, por fin se me hizo visitar el Ginkakuji o Templo Dorado de Kyoto: subarashii. En el camión conocimos a una pareja de australianos. El chavo, muy amable le ofreció el asiento a Harvey y cuando se agarró del pasamanos, leí el tatuaje de su brazo: Carpe Diem. Así es...

Mañana me enfrento a un reto enorme: hablar de Frida Kahlo y Diego Rivera en la Universidad, frente al Sensei y los compañeros... caaaalma, no es en japonés, sino en inglés, pero lo tremendo aquí es presentar a dos personajes tan importantes en la vida cultural y social de México. Frida me encanta ¡A darle!

martes, 8 de julio de 2008

Hasta pronto, Guille y Chelo


Guille, el amigo de Sevilla que me enseñó a crear un blog se regresa mañana a España... te vamos a extrañar, pero seguramente nos reuniremos en otro lugar, en otra ocasión. ¡Gracias, amigo!

Luis-Chelo me ayudó a ponerle camarita al Skype y Hotmail... Hoy también se fue el buen Chelo. Me dio gusto encontrarlo en Skype por casualidad (¿existen las casualidades?). 
Seguramente la encontrará difícil de regreso a México, pero seguro que estará bien. ¡Un abrazo!

martes, 1 de julio de 2008

Ishio-ni

Ayer llegó Joel de San Francisco con un día de retraso porque perdió una conexión por los incendios de California. En fin, llegó y Henri fue a recogerlo al aeropuerto. Nos vimos en Kyoto para cenar con el Sensei y su esposa. Me dio mucho gusto ver a mi hermano y él también estaba muy feliz. Se rapó hace poco y se ve muy guapo. El Sensei se lleva muy bien con Henri, hablando de motos y lucha libre.

Esta noche salimos con dos amigos motociclistas a un hotel en el centro de Osaka. Muy lindo, muy rico. Era un buffet de comida internacional. Lo que más me gustó fueron los postres, me comí como 6. Shina-san es diseñadora y tiene varias motos, pero llegó con una Hayabuza, que según me cuenta, tiene el record Guinness de velocidad: 300 km/h, o sea, igualito que el Shinkansen. Le pregunté si alguna vez ella lo había logrado y sacó su cel para enseñarme el videíto donde grabó su hazaña, en una carretera plagada de autos y camiones... sugoi!!! 

jueves, 26 de junio de 2008

Vespa Japan



Llegó Héctor-san a Osaka. Qué alegría. Ayer fuimos con Henri a una reunión del Club Vespa en Japón. Nos enteramos de la reunión buscando en la página que Enrique Mujica (sí, ese mero) nos hizo favor de recomendar.
Total que buscando el susodicho punto de reunión (yo llamé antes para confirmar, en mi limitadísimo japo) pensamos que lo más obvio sería que hubiera motos afuera... pero no!!! Aquí no toman y beben, así que llegaron en bici o en metro.
Los cuates felices de saber del Club Vespa de México, nos enseñaron sus celulares con fotos de sus motos. Comimos juntos y nos tomamos muchas fotos. Al final, hicimos una rifa de unas playeras que trajo Henri pa´regalar. Me dio muchísimo gusto verlo tan feliz.

En realidad, Henri es feliz nomás de vivir... y me contagia.

Soy muy afortunada de que haya gente como él y todos mis amigos en mi vida. ¡Gracias!

Oyasuminasai!

martes, 24 de junio de 2008

Where do we go, nobody knows


Es tarde y debería irme a dormir, pero aquí estoy, chateando con Henri que está en Tokyo y esperando que salga la ropa de la secadora.
Hoy fue un día especial. Me quedé en mi cuarto para revisar muchas lecturas para mi curso y tenía ganas de que nadie me viera, pero... hicieron un simulacro de incendio y tuve que encontrarme con mi coordinador en el área de resguardo. No sabía si reír o llorar.
En la tarde fui a conocer la recién estrenada cocina del tercer piso, gracias a la gentil invitación de Tony, que hizo machaca y pay de limón. Mmmmmmmm......

Quiero contar algo que me ha encantado de la visita de Henri. Pasé uno de mis mejores días en Japón este sábado. Salimos en bicicleta desde Mino hasta Tennoji. En términos chilango es como ir de Xochimilco a Toreo. Nos tomó 5 horas por varias razones: yo estaba superando uno de mis más grandes miedos: andar en bicicleta, además de que llovía y por si fuera poco, no sabíamos hacia dónde era el sur. Henri se enteró de que cada vez que uno pregunta algo en este país, implica unos 5 minutos de conversación o, como leí alguna vez: dos monólogos no hacen un diálogo.

Me gustó mucho mojarme, cansarme, perder el miedo, disfrutar de esta ciudad de noche, esquivando gente, subiendo puentes, ver paisajes, tomar fotos, llegar a las dos de la mañana, exhausta, sintiendo el dolor de estar viva... subarashii

Mi recomendación para acompañar esta lectura: Johnny Cash-Hurt (NIN)

Ahhh, que no se me olvide: me contestó Fernando Rivera Calderón un mailsito y me mandó una canción!!!! Para más información:
www.myspace.com/monocordio

jueves, 19 de junio de 2008

Ver para creer


Henri y yo tomamos un camión para llegar a un templo y al poco tiempo de bajarnos del susodicho camión ruta 9 en Kyoto, nos dimos cuenta de que su mochila de espalda (back pack) se había quedado allí. Él se puso muy mal porque traía el pasaporte y todo el dinero. le dije con toda seguridad que no se preocupara, que nadie iba a tomar sus cosas. Así que tomamos un taxi y le pedí en mi muy pobre japonés al conductor: "alcance al camión 9 porque se nos olvidó la maleta allí, kudasai". El hombre se instaló en su papel de Yeimusu Bondo y finalmente alcanzó al camión, se paró frente a él y se bajó para hablar con el chofer, que inmediatamente nos dio la mochila. Je, je, je, sólo en Japón...

martes, 17 de junio de 2008

Dreams come true


Otra vez estoy en mi cuarto, viendo de reojo una película con Clint Eastwood y Kevin Costner. La Luna brilla sobre los edificios. El fin de semana estuve en Tokyo. Henri y yo caminamos durante horas, después de tres meses de no vernos. El tiempo más largo. En la noche lo llevé a ver la Torre de Tokyo, una copia de la Eiffel, pero que realmente no le llega más que en estatura. De pronto, recordé que hace poco más de un año estuve caminando por ese mismo lugar y que le prometí a Henri que algún día estaríamos juntos en Japón juntos. Ese día llegó...
 

mimetizando

Me parece que a este diario abandonado, le vendrán bien algunas fotos. Aquí estamos nina y yo en la cafetería de la Universidad. Con todo y que tenemos muy poquita ropa, nos vestimos igual ese día, así que ahí está el testimonio, junto con "cuidemos el agua".

domingo, 8 de junio de 2008

Kyoto

Kyoto es una ciudad muy interesante, con más de 1,600 templos budistas (Lonely Planet). Sin embargo, decidí visitar otros lugares. Esta foto es del Jardín botánico que me recordó la escena de las flores de Alicia en el País de las Maravillas.

El Museo Internacional de Manga tiene miles de libros de este género japonés y la gente puede salir a leerlos en el pasto. Me acordé de Erick e Iván, las criaturas ingratas...

Los volantes aquí te los dan con un paquete de kleenex y ahora tengo unos con fotos de chicas sexy, que le voy a guardar al Javis y a Pez.... ¿por qué Pez?

viernes, 6 de junio de 2008

Tarde...

Hoy me enteré de que sí duermo con la cabeza hacia el sur. Estoy cenando los últimos panes con pasas que compraré. No más carbohidratos en exceso.

En la mañana tuve una llamada de una mujer que conocí por el amigo del amigo. Después la busqué en google y me entero de que ha escrito varios artículos sobre la importancia de la educación para la liberación de las mujeres.

Bueno, Guille-lector, gracias por el Lonely Planet. Un abrazo y buenas noches.

miércoles, 4 de junio de 2008

Lavando ropa

¡Hola! Estoy en mi heya viendo la tele y me entero de que Barack Obama ganó la candidatura democrática de EU, ¡qué tal!!!! Recuerdo que hace algunos años hablaba con el tío Hank en un Thanksgiving en Los Angeles sobre las remotas y poco probables posibilidades de que algún día ese país tuviera un presidente negro -o afroamericano- o mujer. Él decía que de las dos, veía menos probable la primera. Bueno, ahora recuerdo algo que acabo de leer en un libro de diseño: "sabemos dos cosas acerca de los objetos inesperados: la primera, que siempre suceden; la segunda, que cuando suceden siempre son inesperados". 

No más comentarios políticos...

Hoy fui al Kyoto Costume Institute, que tiene una enorme colección de vestidos del siglo 16 hasta la fecha. Lo malo es que sólo se pueden ver en fotos. Me interesa mucho el vestido pues es una representación social de un momento específico. Por otro lado, es fundamental la relación que la vestimenta tiene con el usuario. Hoy copié esta frase: "any examination of clothing necessitates examinig both the clothing and the body wearing it".

También toqué el pianito y me dio mucho gusto poder leer el pentagrama en clave de Sol. ¡¡¡Guau!!!! Me acordé de cuando daba clases de alfabetización para adultos y las caras de mis alumnas cuando al fin podían comprender algo que antes no tenía sentido. Espero que también suceda con el japonés, eventualmente... 

Me voy a ver la ropa que eché a lavar. Oyasuminasai (¡que descansen!)

lunes, 2 de junio de 2008

Lo material

Hace algunos días escribí que no me falta nada material en mi pequeño espacio. En verdad es así, pero también debo aclarar que tengo objetos muy especiales:

- un guaje de Frida
- mi pianito eléctrico Yamaha
- mi camarita
- un cuarzo
- una falda que tengo como póster
- tres plantitas
- un cojín de colores, junto con un libro de un perrito
- la chamarra verde, awe!
- un vaso de cerámica
- un perrito de peluche
- mis estrellas
- un dibujo de una chica en la playa

Estos triques son realmente valiosos para mí y quien quiera saber por qué, que vea "El violín rojo" y luego me pregunte... 

Lunes

Hoy llovió. Tengo sueño. Cené atún. Leí. Tele. Bai!

domingo, 1 de junio de 2008

Hoy empieza junio

Seguramente voy a decir esto con frecuencia (eso espero): Japón es subarashii, sublime. La visita con la familia fue más de lo que esperaba. Todo estuvo muy organizado. Tomamos el Shinkansen o tren bala hasta una ciudad que se llama Kurashiki. Por cierto, me enteré que corre a la misma velocidad que el TGV (Train Grande Vitesse, de Francia) 300 kilómetros por hora. Los voluntarios nos reunimos en un hotel con nuestras nuevas familias. Casi todos estuvieron con un "hermano" de otra nacionalidad, pero afortunadamente a mí me tocó ser hija única; me encantó esa sensación. En realidad, todo fue muy especial, como venido del cielo. Mi okaasan (mamá) tiene una historia muy peculiar. Es dentista y su consultorio está junto a la casa. Sus hijos ya se fueron a estudiar y vivir a otras ciudades y su esposo vive en Himeji, que es una ciudad a una hora y media de distancia en auto. Él la visita los fines de semana. Le pregunté si no extrañaba a sus hijos y me respondió que no porque ella tiene vida propia, yes! Sobre el esposo me dijo que la distancia les funciona mejor y realmente se ven muy felices. 

Debo contar que llené una hoja donde nos preguntaban qué platillos comemos y si nos gustan los animales dentro o fuera de la casa o de plano no animales. La verdad, a mí no me gusta cualquier comida y no me gustan los animales dentro de la casa; pero pensé que por un fin de semana no me haría la difícil. Lo único en lo que fui muy selectiva fue en que enfaticé que quería aprender sobre caligrafía y no más ceremonia del té, ni ikebana (arreglo de flores). 

Pues sí, mi casa tenía un perro. Pero curiosamente, es del mismo tipo que el de mis tíos de Los Angeles, con los que viví hasta enero. De repente hasta le grité "Burkley!" porque igual que la versión gringa, es muy cariñoso. Éste se llama "Biki". Continuando con la lista de peticiones, me dieron de comer como reina, de-li-cio-so. Además, mi casa tiene un piano, así que aproveché para tocar las primeras notas del Vals de Amélie, que es lo único que puedo hasta ahora. 

Después, ¡clase de caligrafía! "Casualmente" (¿existe la casualidad?) mi mamá toma clase de caligrafía, así que me enseñaron cómo escribir mi nombre en Kanji. Esto funciona más o menos así: se escoge el significado más hermoso de cada sílaba. Mi nombre es "ra=bien", "u=ser".

En la noche, preparamos mi futon, que es una cama sobre el suelo y mi mamá me explicó algo muy curioso. Dijo que debo poner la cabeza hacia el sur porque los muertos la tienen hacia el norte. Me llamó la atención porque hace casi un mes empecé a dormir del lado opuesto de la cama, con la cabeza hacia la ventana en vez de la cabecera. Hoy voy a investigar dónde está el sur...

Hoy me levanté tardísimo,  a las 9am, y me dieron un desayuno fabuloso, con pescado fresco y sopa de aguacate, para recordar México. Me llevaron a la montaña a visitar el atélier de un artesano de cerámica, que por cierto vivió 7 años en Los Angeles. Tomamos té con una vista maravillosa.

Cambio y fuera, me voy a cenar antes de que cierren la cafetería... 

viernes, 30 de mayo de 2008

Sábado nublado

Ok. Estoy a punto de irme a un Homestay, es decir, me voy a quedar en casa de una familia japonesa. Les llevo como regalito unos dulces mexicanos con cajeta (ojalá me conviden). El día es nublado.

Les cuento rápidamente las cosas que más me han gustado de Japón:

- ¡el agua es potable! A todos lados llevo mi botella y la puedo llenar en cualquier baño. Tomo agua del lavabo.
- ¡la seguridad! En el metro, a cualquier hora, está la gente trabajando en sus laptops, con sus iPods, sus bolsas caras y no pasa nada. Ok, me dirán que es porque todos disfrutan de los mismos privilegios. El hecho es que se trata más bien de una cultura de respeto mutuo. Al respetar al otro, me respeto a mí. Por ejemplo, el otro día perdí el estuche de mi cámara y me dormí muy tranquila sabiendo que al día siguiente estaría en las cosas perdidas. Así fue. Éste es un aspecto que realmente hace funcionar todo mejor. Como alguna vez dijo Carlos Kasuga (Director de Yakult en México) en una conferencia "si no es tuyo, es de alguien más". En Japón se ven cositas tiradas y olvidadas por todos lados; pero la gente no las toma, por si regresa su dueño. Increíble.
- lo verde. Todo es verde, verde que te quiero verde. Les encanta la naturaleza y la cuidan mucho.
- las bicis. La bici es esencial en este país. Yo tengo una en la Universidad, en Kyoto. Lo malo es que no usan casco porque son muy hábiles. Uno puede ver a una abuelita a toda velocidad, con un paraguas en una mano y la otra al volante. A mí me falta destreza; pero no ganas.
- ¡los japoneses! Son realmente hermosos. Mujeres y hombres por igual. Son muy delgados, altos, se ven más jóvenes de lo que son, les encanta verse fashion: cabello, ropa, zapatos, todo tiene una intención. Por cierto, usan playeras con mensajes en inglés y yo apunto los que me gustan. Éste, por ejemplo: "life is short, celebrate early".

Ahora estoy escuchando Badly Drowned Boy. Les escribo mañana para contarles cómo estuvo la visita con esta familia. Prometo portarme bien.

Viernes en mi heya

Al fin, al fin. He creado este blog -mi primero- con el fin de que mi familia y amigos sepan un poco de mi vida por acá. No soy muy ciber, pero poco a poco le agarraré la onda.
¿Cómo empezar?, ¿por lo pasado o por lo que hago?... Me contesto: "empieza por el principio y cuando termines, te callas" (Alicia en el País de las Maravillas).

Ok. En este momento estoy en mi heya, o sea, mi cuarto que más bien es un depa porque lo he acondicionado como un hogar, ¡hasta tengo un pianito eléctrico! La verdad es que tengo de todo: cama mediana, escritorio, tele, DVD, VHS, clóset, cajones, un librerito, caja fuerte, balcón con una vista increíble (vivo en el 8vo piso) y ¡baño con tina! (sólo una vez he usado la tina). En serio que en bienes materiales no me falta nada. Sí me visto un poco como retrato porque traje poca ropa de México, pero todo lo demás lo tengo. Hasta tengo mi compu, desde donde se escriben estas letras.

Aunque los que me conocen saben que no veo tele, ahora sí lo hago porque me ayuda mucho a aprender japonés. Los comerciales son muy interesantes.

Me despido por esta ocasión, al ser casi la medianoche.

miércoles, 28 de mayo de 2008

Bienvenid@!

Éste es mi primer blog. Gracias Guille!